Desde el año 2019, Perú ha consolidado su posición como el primer exportador de arandanos en el mundo, superando a otros grandes competidores como Chile, Canadá, los Países Bajos y España. Esta notable trayectoria de crecimiento puede observarse en la evolución de las exportaciones de arándanos en los últimos años, donde el volumen exportado por Perú ha experimentado un crecimiento exponencial desde 2013, llegando a un máximo histórico de 276 mil toneladas en 2022.
1. Primeros Ensayos: Inicios de la Década de 2000
La historia de los arándanos en Perú comienza a principios de los años 2000. En ese momento, el arándano no era un cultivo tradicional en el país, ya que se centraba más en productos como espárragos, paltas y uvas. Sin embargo, el interés en diversificar la oferta agrícola llevó a realizar los primeros ensayos experimentales de cultivo en algunas zonas del país, especialmente en la costa norte y en los valles interandinos. Las condiciones climáticas de Perú, con una costa desértica que ofrece mucho sol y riego controlado, resultaron ser ideales para el cultivo de arándanos.
2. Primeras Exportaciones de arándano en Perú: 2012-2013
En 2012, Perú realizó sus primeras exportaciones de arándanos a pequeña escala. Los volúmenes eran modestos, pero este fue un momento clave para la industria. Los primeros envíos se dirigieron principalmente a mercados como Estados Unidos y Europa, que ya demandaban grandes cantidades de este «superalimento» debido a su contenido en antioxidantes y otros beneficios para la salud. Los primeros éxitos comerciales confirmaron que el país tenía un potencial competitivo a nivel mundial.
3. Expansión y Aumento de Inversiones: 2014-2016
Después de las primeras exportaciones, las empresas peruanas comenzaron a invertir fuertemente en tecnología agrícola y en la ampliación de las áreas de cultivo. Durante este período, algunas de las principales agroexportadoras del país comenzaron a apostar por el arándano como un cultivo estratégico. Esto incluyó la introducción de nuevas variedades, adaptadas a las condiciones del país, y la adopción de técnicas avanzadas de riego y manejo agrícola.
Uno de los factores clave fue la capacidad de producir durante contraestaciones, es decir, mientras otros países exportadores como Estados Unidos y Canadá tenían limitaciones climáticas, Perú podía ofrecer arándanos frescos prácticamente todo el año. Esta ventana de oportunidad fue fundamental para captar la atención de mercados internacionales.
4. Consolidación en el Mercado Internacional: 2017-2019
Para 2017, las exportaciones de arándanos peruanos ya habían superado las 40 mil toneladas, y el crecimiento fue vertiginoso en los años siguientes. Durante este periodo, Perú desplazó a Chile como el mayor exportador de arándanos de América Latina. La mejora en las técnicas de producción, la capacidad de envío eficiente y la diversificación de los mercados internacionales (especialmente en Asia y Europa) jugaron un rol esencial en este despegue.
En 2019, Perú se convirtió oficialmente en el mayor exportador mundial de arándanos, superando a competidores tradicionales como Chile, Canadá y España. Las exportaciones alcanzaron nuevos máximos históricos, estableciendo al país como líder indiscutible en la industria.
5. Innovación y Crecimiento Sostenido: 2020 en Adelante
A partir de 2020, el sector continuó innovando en nuevas variedades de arándanos, muchas de ellas con mayores rendimientos y mejor adaptadas a las preferencias de los consumidores internacionales. También, las prácticas de sostenibilidad y la mejora de la logística de exportación han permitido a Perú mantenerse competitivo frente a otros actores globales.
En menos de dos décadas, el país ha pasado de no ser un jugador en la industria a convertirse en el líder mundial en exportaciones de este fruto, un logro notable que ha transformado la agricultura peruana.
Perú ha demostrado ser un líder indiscutible en el mercado mundial de arándanos, gracias a su capacidad de innovación, expansión y adaptación a las demandas del mercado. El país no solo ha superado a sus competidores tradicionales, sino que también ha establecido una sólida presencia en mercados clave, asegurando su posición como el primer exportador de arandanos desde 2019. Los esfuerzos por continuar mejorando la producción y la calidad del producto posicionan a Perú como un referente en la agroexportación, con miras a seguir liderando en los años venideros.
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